DE COMO SER UN ANTISOCIAL

|

En una mesa un grupúsculo de personajes masticaban los pedazos de carne que un amigo había cocinado sobre los hierros calientes de una parrilla (los hierros de una parrilla siempre están calientes cuando se cocina sobre ella no?). Estos personajes hablaban y hablaban sobre las virtudes y problemas de los países que sus culos habían logrado visitar. Pero había uno y una. Una dupla, creo que en realidad lo único realmente molesto en esa mesa eran ellos dos. Un tal Meñique y una tal no se qué. Él de México (D.F y lo aclaro porque ellos lo aclaraban todo el tiempo), ella no lo se. Cuestión que la muñequita no paraba de gritar estupideces muy cerca de mi oído (cuál es la diferencia entre un cortometraje y un largometraje...sólo la duración?) y mientras tanto la pedantería del Mexicano cruzaba las fronteras de lo soportable. Yo creo que la gastronomía de Chile es muy mala. Yo creo que. Yo. Yo. Yo. Un tipo realmente asqueroso. Mientras soportaba con mi mejor cara de qué sabroso está todo y qué bien la estoy pasando, pensaba: algunos tuvieron la oportunidad de recorrer esta tierra y observar de cerca infinidad de cosas. Pero sin embargo eligieron quedarse con aquellas pequeñeces que pueden encontrarse en el cajón de cualquier mesa de luz. Mientras los escuchaba hablar de la corrupción latinoamericana y los sistemas de señalización europeos, trataba de imaginarme cómo golpea la luz en las calles madrileñas en primavera. Cuál es el mejor asiento que uno puede tener en invierno mientras las manos buscan calor dentro de los bolsillos del saco y en las plazas del mundo la gente fuma y se ríe. En Tailandia el agua de los vasos con agua tiene el mismo sabor que el agua que escupen las cañerías de algún hotel barato cerca del Peñón de Gibraltar? En verano llamaban a la mujer que aman o amaron y la invitaban a sentarse en el cordón de la vereda sólo para enseñarle que la cerveza tiene mejor sabor si se toma en la calle? Se dormían en sus camas no sin antes pensar que si dios existe se debe parecer a la sensación que provocan las sábanas limpias? Caminaban desnudos por sus casas de cualquier lugar del mundo, a las tres de la mañana, mientras el silencio era dueño de la noche, sólo para sentir la caricia de la oscuridad que respira en los sillones y en las mesas y en los almohadones cuando los demás duermen? Quizá sí lo hicieron y prefieren desperdiciar a sus amigos en conversaciones banales y pseudo-activistas. Quizá crean que uno debe informarse y viajar y aprender a cocinar y escuchar opiniones y leer el diario y volver a viajar y tener socios y decir cosas como a vos que te gusta escribir y tomar agua mineral y hablar sobre la importancia de la nomenclatura del pescado y ser director de cualquier porquería y blah blah blah. Y mientras ellos parlotean el mundo sigue su inagotable marcha y la gente se muere y los niños crecen y las carreteras y las playas de estacionamiento cubren la tierra y los ríos se terminan y los presidentes le sacan lustre a sus bombas y hay costas que detestan la marea y hay marea roja y hay un hombre que sufre de tristeza encerrado en una ciudad que no conoce y están los hospitales que mantienen ese inquietante olor y está ella que se rie y me hace creer que nada de todo esto tiene importancia mientras todos los minutos de la vida se juntan en la esquina y hacen que las hojas caídas del otoño se muevan erráticamente sobre la vereda cumpliendo su única y maravillosa función. Darle sentido al azar.
Si el mundo tiene este tipo de cosas. Para qué perder el tiempo hablando de uno mismo?

0 Humanos Comentarizaron: