Hay que hacerlo. Hay que decirlo. No queda otra opción. No hay más posibilidades. Los rompe-portones estallan en las esquinas sin necesidad física de ningún portón. La cañitas voladoras realmente vuelan. La sidra, el pan dulce, las putas garrapiñadas, los lugares comunes de estas navidades comunes serán una vez más ocupados y disfrutados por todos nostros. Si nena. Si muñequita. Los antihéroes, también brindamos.
A todos los que estuvieron presentes durante el 2006. Gracias. Ah si.... me olvidaba. Feliz Navidad!
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